Lautaro Celayes, presidente del Centro Vecinal expresó su preocupación por el avance de los robos y el consumo de drogas. Piden acciones efectivas por parte del gobierno.
Un ataque brutal contra una joven de 17 años en barrio Güemes, Córdoba, ha conmocionado a la comunidad y a los medios de comunicación. El hecho, ha puesto de manifiesto una situación de inseguridad creciente en la zona, conocida por su atractivo turístico y su movida gastronómica.
Los vecinos tienen perfectamente identificadas cuáles son las cuadras y los pasajes que hoy están dominados por los delincuentes. La violencia en el barrio no es un episodio aislado; de hecho, el primer día del año ya se registró un caso de un joven de 15 años detenido dos veces en menos de 12 horas por robos en la misma área.
Lautaro Celayes, presidente del Centro Vecinal de barrio Güemes, expresó que «hace muchos años viene increscendo» la inseguridad. En una reunión reciente con funcionarios del Ministerio de Seguridad, los vecinos manifestaron su preocupación y fueron asegurados de un patrullaje policial las 24 horas en el sector. Sin embargo, enfatizó que «la cuestión de la seguridad es el síntoma y en realidad la enfermedad tiene que ver con otra cosa y es la pobreza estructural no atendida».
Celayes también señaló que el barrio presenta «cinco realidades» distintas, y que la situación se agrava con el aumento de jóvenes en situación de calle, muchos de ellos afectados por el consumo de drogas. «La cantidad de pibes en la calle adictos al Pipazo es impresionante», afirmó, subrayando la necesidad de abordar la problemática desde múltiples ministerios y no solo desde la seguridad.
La comunidad se siente cada vez más insegura. «La gente que no es culpable, quien no tiene poder para mover ningún recurso, está encerrada en su casa», comentó, resaltando el miedo que sienten al salir a la vereda. La situación ha cambiado drásticamente en los últimos años, y lo que antes era un barrio tranquilo ahora enfrenta serios problemas de inseguridad y violencia
El ataque a la joven ha dejado a la comunidad en estado de shock. «Es un verdadero espanto», dice Celayes, quien también confirma que la víctima recibió atención médica. La investigación avanza, y el agresor se encuentra detenido, enfrentando cargos de abuso sexual y robo calificado.
