El piloto elogió el trabajo del equipo para optimizar el desempeño del auto del viernes al sábado. Tras la sanción a George Russell, el francés largará desde la cuarta posición este domingo.
Este sábado, el Gran Premio de Baréin dejó una sorpresa agradable en el paddock de la Fórmula 1. Alpine, una escudería que busca consolidarse en la mitad de la tabla, logró un rendimiento excepcional en la clasificación, posicionándose como candidata a sumar puntos por primera vez en la temporada.
El protagonista inesperado de esta hazaña no estuvo presente en el circuito, pero su impacto fue decisivo: Franco Colapinto, el piloto reserva argentino, brilló desde la base de Enstone, demostrando que su papel tras las pantallas puede ser tan crucial como el de quienes corren en pista.
Una noche de estrategia y esfuerzo.
Mientras los reflectores iluminaban el circuito de Sakhir, Colapinto, desde la sede de Alpine en Inglaterra, planteó el desafío de ser el piloto del simulador. Su tarea no fue menor: coordinar con el equipo en la caja, analizar datos y proponer soluciones que luego se trasladarán a la pista.
Según fuentes cercanas al equipo citado por Motorsport.com y F1 Insider, el argentino se quedó hasta altas horas de la noche trabajando codo a codo con Pierre Gasly, el piloto titular francés, para idear una estrategia que marcó la diferencia.
La clave estuvo en los neumáticos blandos. Colapinto y el equipo técnico diseñaron una configuración que permitió a Gasly exprimir al máximo el potencial de su monoplaza, un detalle que el francés experimentó con entusiasmo tras la clasificación. «¡Qué cambio respecto a ayer! Entendemos muy bien el neumático. Mañana sumaremos puntos, chicos, gracias» , exclamó Gasly por la radio, en un mensaje que muchos interpretaron como un reconocimiento directo al trabajo del argentino.
«Fue realmente increíble. Vamos, chicos. Gran clasificación. Estoy muy orgulloso. Al principio me costó, pero mejoré mucho. Estoy muy contento porque no fue fácil. Fue realmente duro. ¡Buen trabajo!», añadió Gasly, dejando en claro que el esfuerzo colectivo, liderado desde la distancia por Colapinto, había dado frutos.
Un guiño que no pasó desapercibido
La frase de Gasly no solo reflejó el alivio y la satisfacción del piloto, sino que también fue tomada como un guiño explícito al aporte de Colapinto. El nacido en Pilar, que recientemente revolucionó a sus fanáticos al publicar una foto desde la base de Enstone, se ha ganado el respeto del equipo y de los seguidores de la Fórmula 1. En redes sociales, las reacciones no se hicieron esperar: hashtags como #Colapinto y #AlpineTrend se volvieron tendencia, con miles de usuarios celebrando el rol estratégico del argentino.
Un futuro prometedor para el argentino.
El resultado en Bahréin no solo ilusiona a Alpine, que ahora mira con optimismo la carrera del domingo, sino que también refuerza las aspiraciones de Colapinto en la máxima categoría. Aunque no está en el paddock como piloto titular, su rol de reserva está demostrando ser mucho más que un simple respaldo.
La escudería francesa parece haber encontrado en él un activo valioso, capaz de aportar desde la estrategia y la simulación, áreas cada vez más críticas en una Fórmula 1 dominada por la tecnología y los datos.
