El Presidente acusó al gobernador bonaerense de ser “incompetente” y propuso que el Gobierno nacional tomara el control de la provincia tras el brutal asesinato de la nena de 7 años.
Javier Milei le pidió a Axel Kicillof que renunciara para que Nación interviniera la provincia de Buenos Aires tras el crimen de Kim Gómez, una niña de siete años asesinada durante un robo en La Plata.
La solicitud se produjo en el marco de la conmoción que generó el caso, que reavivó el debate sobre la inseguridad en el conurbano bonaerense.
Milei, en su mensaje, afirmó: “La inseguridad ha alcanzado niveles intolerables y la provincia necesita un cambio urgente”. Este pedido se produjo en un contexto de fricciones entre el Gobierno nacional y la gestión provincial.
El crimen de Kim Gómez propició cruces de declaraciones entre las autoridades de la Nación y la provincia, a medida que la presión social para mejorar la seguridad aumentó.